Desarrollo de Nuevas Conductas
Hasta ahora hemos hablado de cómo las consecuencias pueden modificar la probabilidad de aparición de una conducta específica y del control de estímulos, pero también, el condicionamiento operante ofrece una respuesta a la pregunta de cómo aparecen nuevas conductas; la respuesta a esta pregunta había sido una de las grandes debilidades del paradigma de condicionamiento clásico para explicar la conducta compleja. Los dos procedimientos básicos que invoca el condicionamiento operante son el moldeamiento y el encadenamiento:
El moldeamiento:
Cuando un niño nace su conducta voluntaria es altamente indiferenciada, y a través del aprendizaje operante va tomando diferentes formas bien definidas. Así por ejemplo, los primeros movimientos motores son en principio intentos difusos de desplazarse u obtener un objeto, pero gradualmente el niño va adquiriendo mayor control de su conducta gracias, además de la maduración, al efecto inmediato de su comportamiento, donde aquellas respuestas o combinaciones de respuestas que dan resultado son seleccionadas y fortalecidas, mientras que los movimientos inútiles son extinguidos.
Skinner(1953) moldeamiento, porque es similar al trabajo que realiza un escultor con un pedazo de piedra al que va dando forma poco a poco con el martillo y el cincel. De esta manera sucede con el lenguaje, inicialmente debido a su potencial innato, el niño expresa una gran cantidad de ruidos indiferenciados, pero más adelante la emisión de sonidos articulados y su combinación es reforzada diferencialmente de tal manera que la conducta de hablar va tomando una forma específica.
Por ejemplo, un niño puede señalar una galleta y decir “eta”, a lo cual sus padres le prestarán atención y probablemente le alcancen la galleta. Luego los padres no atenderán tanto al sonido “eta” y el niño se verá forzado a decir algo más cercano como “aeta”, después dirá “gaeta”, hasta que finalmente diga “galleta”. En estos casos actúa la imitación de sonidos de los padres, pero el reforzamiento de aproximaciones graduales a la conducta deseada es un paso indispensable para que se moldee la conducta. Otro caso donde actúa el moldeamiento es en el aprendizaje de la escritura.
El encadenamiento:
Un segundo caso de aprendizaje de conductas nuevas es el encadenamiento, o desarrollo de cadenas de conducta. Las cadenas de conducta son series de respuestas que suceden en una secuencia más o menos ordenada. Ejemplos de cadenas de conducta son: lavarse los dientes, bañarse y vestirse, los rituales religiosos, armar o desarmar un aparato,etc. En estos casos, se asume que cada respuesta que es un eslabón en la cadena ya pertenece al repertorio de conductas del sujeto, pero lo nuevo es que estén combinadas en una nueva secuencia y la conducta anterior es estímulo discriminativo para la siguiente.Un ejemplo muy común de una cadena es el aprendizaje de un himno, donde cada estrofa es un estímulo discriminativo para la siguiente estrofa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario